SUSTANCIAS QUE PROVOCAN ALERGIA

La alergia es una respuesta exagerada de nuestro organismo cuando entra en contacto con determinadas sustancias provenientes del exterior.

Las sustancias capaces de provocar una reacción alérgica se conocen como sustancias alergénicas o, simplemente, alérgenos.

Es en el sistema inmunitario, o sistema defensivo del organismo humano, en el que está encuadrada la alergia. Dicho sistema está constituido por un conjunto de células que encontramos tanto circulando por la sangre como formando parte de distintos órganos. Su misión es fundamental: reconocer la entrada en nuestro cuerpo de elementos extraños y organizar la defensa frente a ellos. Esto se conoce como respuesta inmunitaria. Gracias a ella nuestro sistema inmunitario reconoce las bacterias o virus, agentes ajenos a nuestro organismo, como causantes de la infección. Si no fuera así, cualquier infección de las que sufrimos a lo largo de nuestra vida (una gripe o un resfriado) podría tener consecuencias fatales al no encontrar resistencia a su progresión.

Como se ve, la respuesta inmunitaria es de gran importancia aunque, en ocasiones, es causa de serios problemas:

  • En los transplantes de órganos (riñón, corazón, pulmón...) nuestras defensas inmunitarias identifican el nuevo órgano implantado como extraño e intentan combatirlo, produciéndose el rechazo si no se administran medicamentos para disminuir esta respuesta (los llamados inmunodepresores).
  • En ocasiones el sistema inmunitario confunde componentes de nuestro cuerpo con elementos extraños e inicia una reacción contra ellos dando lugar a las llamadas enfermedades autoinmunes (muchos procesos reumáticos tienen este origen).
  • A veces se produce una respuesta inmunitaria ante la presencia de sustancias inocuas para el organismo, que habitualmente son toleradas por éste. Esta reacción exagerada se llama alergia, y las sustancias que la desencadenan son ALÉRGENOS.